About a matcha and a comfortable afternoon 🍵💚

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Hello, hello, photogenic hivers.

So, the other day I was visiting the most warmingly themed cafe in Valencia and I couldn't help but take some pictures. It was super cute and nice, the best thing about it was that I could take my laptop with me and do some work there.

My inner child probably jumped with excitement at the sight of so many books in a very pinterest style, although I tried to hide it as best I could.

But my intention was much more than just the place, because the truth is, I've been dying to try for months the Matcha Tea that I know they offered there and I can only say that when I go there again, I definitely have to try it again. First of all the taste was very good, obviously it is very similar to the taste of green tea that you could buy in any shop, but the subtle and significant difference is that it also had a hint of something much more natural, like a pure tea. Added to the milk, every sip felt like a hug from grandpa.

Oh, and they also give you one of those recycled-looking papers where you can draw whatever you want (they also give you some crayons) and they gave us some aesthetics stickers.

And although I really missed exploring more of the place, when I go back it will probably earn a video in my vlog because it's another level of calm to be there.

Hope everyone is having a good day. See you later. Adiocito

P.S: Did you guess the protagonist of my masterpiece? A so-called crazy moon over there insisted that he looks more like Joey.

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ESPAÑOL

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Hola, hola, hivers fotogénicos.

Así que, el otro día estuve visitando el café con la temática más encantadora posible en Valencia y no pude evitar tomar unas fotitos. Era super lindo y agradable, lo mejor de todo fue que pude llevar conmigo mi Laptop y trabajar un poco allá.

Probablemente mi niña interior salto de emoción al ver tantos libros muy al estilo pinterest, aunque trate de disimularlo lo mejor que pude.

Pero mi intención era mucho más allá del sitio, porque la verdad, moría de ganas desde have meses de probar el Matcha Tea que se que ofrecían allí y solo puedo decir que cuando vuelva a ir, definitivamente tengo que volver a tomarlo. Primero en sabor era muy bueno, obviamente es uno muy parecido al sabor del té verde que podrías comprar en cualquier tienda, pero la sutil y significante diferencia es que también tenía un toque a algo mucho más natural, como un té puro. Sumado a la leche, cada sorbo se sentía igual a un abrazo de abuelito.

¡Oh! Y también te dan una cartulina de estas que parecen recicladas donde puedes dibujar lo que quieras (también te ofrecen unos creyones) y nos regalaron algunos stickers del lugar aesthetics.

Y aunque en realidad me falto explorar más del lugar, cuando vuelva es probable que se gane un video dentro de mi vlog porque es otro nivel de calma estar allí.

Espero todos estén genial. Se les quiere. Bye, bye.

P.D: ¿Adivinaron al protagonista de mi obra maestra? Una luna disque loca por allí insistió en qué se parece más a Joey.