Amaneciendo
Los atardeceres son espectaculares, según en el sitio en el que te encuentres, todavía más. Pero, ¿qué me decís de los amaneceres? Es otro de los espectáculos que nos ofrece la naturaleza y que al que solemos prestar menos atención, generalmente porque vamos como locos preparándonos para ir a trabajar... que si desayuna rápido, prepara todo lo de las niñas, haz que estén preparadas para salir de casa, intenta organizar un poco la comida de ese día, coge el coche, y... amanecer que se te ha pasado y que no has podido disfrutar.
El estrés del día a día hace que no le prestemos atención y, cuando llega el fin de semana, lo último que te apetece es madrugar para ver ese amanecer que luego te maravilla.
Por eso hay que aprovechar esos días de vacaciones, en los que puedes hacer lo que te de la gana, sin mirar al reloj. Disfrutar de un momento de paz y tranquilidad en el que el sol empieza a avanzar poco a poco, en nuestro caso, ganándole terreno al mar, hasta despegarse de él en el horizonte y coger el vuelo que le lleve a todo lo alto del cielo.
Amaneceres de primavera...

