Rosa Blanca. Cuasi soneto
El aroma de café le encantaba
su silueta sensual atraía,
moviendo sus caderas se escapaba
volteando un poco por si alguien la veía.
Pero los años hicieron mito
su dorado cabello
y su rostro que fue bello
con suerte palidecia.
Más yo la seguía viendo hermosa
tan blanca y dulce como la rosa,
que hace años le ofrecia.
Poesía y fotografía
@ saulos
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Bellos versos de amor a través del tiempo, incluso cuando la belleza abandona y se aprende amar el alma. Muy buen trabajo.
Gracias por compartir tus versos con nosotros.
Excelente día.
Gracias a ti amigo. Saludos
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Saludos, a pesar de lo corto es extrañamente enigmático. Eso suele ser así