Men of the Sea| Monomad daily challenge photography [Eng/Esp]

I have always found the work of the fisherman very interesting and risky, in fact I think it is a brave job to go to sea with all the risks that this represents. Especially for artisanal fishermen, who in small boats and only with the help of their hands seek to support themselves and their families.

I live in a small town in Isla Margarita Venezuela, that in spite of being called "Puerto Fermín", everybody knows it as "El Tirano".

It is a small fishing village, where I used to spend my vacations as a child, and where I have lived since I was a teenager, so watching those small boats dodging the waves to get to the sea has been part of my life, and as I mentioned above, I find it very interesting, and from the preparations to go out to the return home is an arduous and dangerous task.

I have seen them fight against the waves with their small boat, both to throw it into the sea and to take it out of it, and without a doubt for me it is something exceptional, which requires great strength and courage, so I had always wanted to photograph part of this whole ritual that involves artisanal fishing, and finally a few days ago on one of my trips to the beach I had the opportunity to do it and of course I had to share it with you!

The pictures were taken with my Samsung Galaxy M12 a few days ago when we decided to go to the beach as a family and the proximity of a small boat with three fishermen inside made us stop our activities.

My husband and the kids immediately got out of the water and I couldn't believe that I could finally take the pictures I wanted so much for this community, and I always dreamed them in black and white as I have seen them in many photographic exhibitions. So I was really happy.

The first thing I noticed was how small the boat was and how hard it was for the fishermen to get it to shore because the swell was quite strong.

The next thing I noticed was that one of the three crew members of the boat was a woman, which for me was really surprising because I had never seen a woman as part of the crew of a fishing boat, which proved to me once again how capable we women are to perform any job in this world!

After I came out of my astonishment I focused again on the work of the three of them, who after getting the boat to the shore were trying to get it out of the sea, which is not an easy task due to the incessant movement of the waves, luckily they received some help from my husband and a guy who was near the place and together they managed to get it out of the sea to continue with their work.

The woman unloaded life jackets, water and other supplies, while the older man organized the fuel and was in charge of lowering the boat's engine for overnight storage, since the boats are stranded on the beach.

For his part, the other fisherman, much younger, was in charge of untangling, washing and picking up the rope to which the anchor is tied.

It was a back and forth from the beach to the place where they would store their work tools during the night and after several comings and goings they finished their work, until the next day when they would take everything back to the boat and launch into the sea.

To be able to take these photographs so close up was a very moving moment for me. It made me reflect on how hard and dangerous the fisherman's life is, especially because the sea is so capricious that they know when they will go out, but not if they will come back.

In fact, our town was in mourning just a few weeks ago with the death of four fishermen who lost their lives at sea due to a breakdown in their boat.

Six of them left Playa El Tirano, of which only three were able to return home; two of them alive and one deceased that their companions managed to keep with them until the moment of their rescue. Unfortunately the other three could not be found. So to see these three people daring to throw themselves into the sea with these recent events moved me completely.

In itself it is hard work, very hard indeed, and having to risk their lives in this way to be able to put food on the table is something that filled me with sadness and although I know that for many people fishing is part of their life and is an art they enjoy, I thought about them, about whether they would be afraid, about how their families are left at home every time they go out to work, especially after what happened a few days ago.

I really don't think it's an easy thing to handle. So in a way this is a tribute to the men and women of the sea, to the artisanal fishermen of my town.

Kisses and blessings

Siempre me ha parecido muy interesante y arriesgada la faena del pescador, de hecho creo que es un oficio de valientes lanzarse al mar con todos los riesgos que ésto representa. Sobre todo para los pescadores artesanales, quienes en pequeñas embarcaciones y sólo con ayuda de sus manos buscan el sustento propio y de sus familias.

Vivo en un pequeño pueblo en Isla Margarita Venezuela, que a pesar de llamarse "Puerto Fermín", todos lo conocen como "El Tirano".

Es un pueblito de pescadores donde solía pasar mis vacaciones de niña, y en el que vivo desde mi adolescencia, por lo que ver esos pequeños botes sortear las olas para hacerse al mar ha formado parte de mi vida, y como les comenté un poco más arriba me resulta muy interesante, y es que desde los preparativos para salir hasta el retorno a casa es una tarea ardua y peligrosa.

Los he visto luchar contra las olas con su pequeña embarcación, tanto para echarla al mar como para sacarla de el, y sin lugar a dudas para mí es algo excepcional, que requiere de gran fuerza y valentía, por lo que siempre había querido fotografiar parte de todo este ritual que implica la pesca artesanal, y finalmente hace unos días en una de mis idas a la playa tuve la oportunidad de hacerlo y por supuesto tenía que compartirlo con ustedes!

Las fotografías fueron tomadas con mi Samsung Galaxy M12 unos días atras cuando decidimos ir en familia a la playa y la proximidad de un pequeño bote con tres pescadores dentro nos hizo hacer un alto en nuestras actividades.

Mi esposo y los niños salieron de inmediato del agua y yo no podía creer que al fin podría tomar las fotos que tanto quería para ésta comunidad, y es que siempre las soñé así en blanco y negro como las he visto en muchas exposiciones fotográficas. Así que estaba realmente agradecida de la oportunidad.

Lo primero que pude notar fue lo pequeño del bote y lo mucho que les costó a los pescadores hacerlo llegar a la orilla pues el oleaje estaba bastante fuerte.

Lo siguiente que note fué que uno de los tres tripulantes de la embarcación era una mujer, cosa para mí fue realmente sorprendente pues jamás había visto a una mujer como parte de la tripulación de un bote de pesca, lo que me comprobó una vez más lo capaces que somos las mujeres de ejercer cualquier labor en este mundo!

Después que salí de mi asombro me enfoque nuevamente en el trabajo de los tres, que luego de lograr llevar el bote a la orilla trataban de sacarlo del agua, lo que para nada es una tarea fácil por el incesante movimiento de las olas, por suerte recibieron algo de ayuda de mi esposo y de un chico que se encontraba cerca del lugar y entre todos lograrlo sacarlo del mar para continuar con su labor.

Cada uno asumió de inmediato una tarea; la mujer descargaba salvavidas, agua y otros enseres, mientras que el mayor de los hombres organizaba el combustible y se encargaba de bajar el motor de la embarcación para guardarlo durante la noche pues los botes quedan varados en la playa.

Por su parte, el otro pescador, mucho más joven que el anterior se ocupaba de desenredar, lavar y recoger la soga a la cual va atada el ancla.

Era un ir y venir desde la playa hasta el lugar donde guardarían durante la noche sus implementos de trabajo y luego de varias idas y venidas terminaron su labor, hasta el día siguiente donde llevarían todo nuevamente al bote y se lanzarian al mar.

Poder tomar estas fotografías tan de cerca, fue para mí un momento muy conmovedor. Me hizo reflexionar sobre lo dura y peligrosa que es la vida del pescador, sobre todo porque el mar es tan caprichoso que ellos saben cuando saldrán, pero no si regresarán.

De hecho nuestro pueblo se vistió de luto hace apenas unas semanas atrás con la muerte de cuatro pescadores quienes perdieron la vida en alta mar por una avería en su embarcación.

Salieron seis de Playa El Tirano, de los cuales sólo tres pudieron regresar a casa; dos de ellos con vida y un fallecido que sus compañeros lograron mantener con ellos hasta el momento de su rescate. Lamentablemente los otros tres no pudieron ser encontrados. Así que ver a éstas tres personas atreverse a lanzarse al mar con éstos hechos tan recientes me conmovió por completo.

De por sí es un trabajo duro, muy duro en realidad, y tener que arriesgar sus vidas de esa manera para poder llevar comida a la mesa es algo que me llenó de tristeza y aunque sé que para muchos la pesca es parte de su vida y es un arte que disfrutan, pensé en ellos, en si sentirían temor, en cómo quedan sus familiares en casa cada vez que salen a trabajar, sobre todo después de lo sucedido hace unos días.

La verdad no creo que sea algo fácil de manejar. Así que en cierto modo éste es un homenaje a los hombres y mujeres del mar, a los pescadores artesanales de mi pueblo.

Besitos y bendiciones

Photography by|Fotografía por:
@rlathulerie, Samsung Galaxy M12

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Cover created in | Portada Creada en Canva

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Edtion by| Edición por:
@rlathulerie on Samsung Galaxy M12

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Separators created in| Separadores creados en Canva

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