Un año || One year

Hace un año que decidí venir a tiempo completo a vivir a la Habana, la capital de todos los cubanos, mucho ha sido lo aprendido, lo vivido, lo sufrido y lo logrado. Me acuerdo en la etapa de la COVID en un buen amigo Jorge Alejandro Pérez Machín, que si estuvo una larga temporada aquí en la Habana, me dijo: "verás como la Habana te cambia en todos los sentidos". Comentarios como esos , añadiendo, loco, dudas, trabas, dificultades, peros, me los llevé todos en la maleta.

• En el primer mes fue el deslumbre, con los nuevos hábitos de vida encontrado en los ojos de los cubanos de a pie e incorporar nuevos hábitos, el deslumbre de la edificación, bares, restaurantes y arte que en mi pueblo no hay.
• El segundo mes fue lidiar con las ganas de volver a casa , fue comprender que si se quiere vivir los sueños despiertos hay que hacer grandes sacrificios , sacrificios que solo los que los hacemos sabemos de su magnitud.

• Al tercer mes el cansancio ya se hacía visible, diez canciones nuevas llenas de vulgaridad por noche en cada guagua, colas, hambre, caminatas y sudor.
  -Cuarto mes, solo , solo más que nunca , mayo amaneció con la opción enminente de abandonar, fue un encuentro conmigo mismo. Fue darme cuenta que las ayudas que tanto se habían brindado nunca aparecieron, que las manos que se extendían eran invisibles. Fue chocar con un egoísmo encontrado en cada esquina y muchos de los que dijeron "cuenta conmigo" simplemente nunca estuvieron.

• Mes cinco fue un nuevo comienzo sin nada a mi favor, fue establecer límites, fue seguir insistiendo como un hábito de vida, fue aprovechar la única rendija que desprendió luz, fue volverse loco dentro de cuatro paredes, extrañar como condición innata, vivir en todos los sentidos un amor cada vez más fuerte y cada vez más a distancia de espacio pero no de tacto .
• Sexto mes fue abrirse a nuevas oportunidades que no llegaron a ningún lado y dejar aún más claro los límites.
  _ El séptimo mes fue el reencuentro con un viejo amigo con el cual me debía y me debo aún tantos escenario y empezar a luchar por lo que realmente importa.

• El octavo mes fue un saneamiento de vicios que no aportan nada y que no podemos permitirnos en cuestiones de tiempo ni la economía.
• El noveno mes llegó con nuevas esperanzas , nuevos amigos, nuevos escenarios, nuevas relaciones de trabajo, una nueva establidad .
• Con el mes 10 llegaron las fuerzas para seguir luchando con el transporte, las colas, los robos y el sudor, las caminatas, las noches de desvelo. También se abrieron nuevos proyectos, nuevas razones por las cuales seguir haciendo música, nuevas canciones.
• Después de once meses solo nos queda ser constantes, como única vía para lograr cualquier meta.

Y después de todo un año retomo la frase de mi amigo y de muchos otros, creo que sí que he cambiado, pero en la moda no, sigo vistiendo igual de cheo y cómodo, sigo sin ganas de peinarme , sigo sin vicios aunque a diario me toquen a la puerta, sigo con un mismo hilo y escencia en las canciones, pero si que he cambiado , cada vez me limito más a pedir ayuda, cada vez soy más servicial, cada vez resuelvo más cosas sin molestar a nadie.

Cada vez tengo más ganas de regresar a casa, cada vez extraño más a mi madre, a mi hermano, sobrina y a Amanda, cada vez siento más profundo la necesidad de acostarme en ese piso frío de cuando se limpia la casa justo al mediodía de cada domingo. Extraño mi barrio y las cenas familiares , eh cambiado si, y me encanta la idea de todos los días no reconocer al tipo del espejo. Seguimos haciendo música.

Las imagenes utilizadas en el post son tomadas de mi galería personal,las fotos son hechas por Iván Soca, el fotógrafo de Silvio Rodríguez. Textos llevados al Inglés por Deepl Traslate. Puedes encontrarme en mis redes sociales YouTube, Threads, Telegram, Instagram.

ENGLISH VERSION (click here!)

A year ago I decided to come full time to live in Havana, the capital of all Cubans, much has been learned, lived, suffered and achieved. I remember during the COVID stage in a good friend Jorge Alejandro Perez Machin, who was here in Havana for a long time, told me: "you will see how Havana changes you in every way". Comments like that, adding, crazy, doubts, obstacles, difficulties, buts, I took them all in my suitcase.

• In the first month was the dazzle, with the new habits of life found in the eyes of ordinary Cubans and incorporate new habits, the dazzle of the building, bars, restaurants and art that in my town there is no. The second month was to deal with the new habits of life found in the eyes of ordinary Cubans and incorporate new habits, the dazzle of the building, bars, restaurants and art that in my town there is not.
• The second month was to deal with the desire to return home, to understand that if you want to live your dreams awake you have to make great sacrifices, sacrifices that only those of us who make them know their magnitude.

• By the third month the fatigue was already visible, ten new songs full of vulgarity per night in each bus, queues, hunger, walks and sweat.
  -Fourth month, alone, alone more than ever, May dawned with the imminent option of giving up, it was an encounter with myself. It was realizing that the help that had been so much offered never appeared, that the hands that were extended were invisible. It was colliding with a selfishness found in every corner and many of those who said "count on me" were simply never there.

• Month five was a new beginning with nothing in my favor, was to establish limits, was to keep insisting as a habit of life, was to take advantage of the only crack that gave off light, was to go crazy inside four walls, to miss as an innate condition, to live in every way a love stronger and stronger and more and more at a distance of space but not of touch .
• Sixth month was to open up to new opportunities that went nowhere and to make the limits even clearer.
  The seventh month was the reunion with an old friend to whom I owed and still owe me so many scenarios and start fighting for what really matters.

• The eighth month was a cleanup of vices that do not bring anything and that we can not afford in terms of time and economy.
• The ninth month came with new hopes, new friends, new scenarios, new work relationships, a new stability.
• With the 10th month came the strength to continue fighting with the transportation, the queues, the thefts and the sweat, the walks, the sleepless nights. It also opened new projects, new reasons to keep making music, new songs.
• After eleven months we can only be constant, as the only way to achieve any goal.

And after a whole year I retake the phrase of my friend and many others, I think I have changed, but not in fashion, I still dress as cool and comfortable, I still don't want to comb my hair, I still don't have any vices even though they knock on my door every day, I still have the same thread and essence in my songs, but I have changed, I limit myself more and more to ask for help, I am more and more helpful, I solve more and more things without bothering anyone.

I miss my mother, my brother, niece and Amanda more and more, I feel deeper and deeper the need to lie down on that cold floor when the house is cleaned just at noon every Sunday. I miss my neighborhood and family dinners, I have changed yes, and I love the idea of every day not recognizing the guy in the mirror. We continue to make music.

The images used in the post are taken from my personal gallery, the photos are made by Ivan Soca, Silvio Rodriguez's photographer. Texts translated into English by Deepl Traslate. You can find me on my social networks YouTube, Threads, Telegram, Instagram.