Good afternoon to all friends of hive, they say that spring is the month of love and that is why I will share, according to those who know, one of the best 10 love poems and I will also share some beautiful photographs taken by me.

I want you at ten in the morning

I love you at ten in the morning, and at eleven, and at twelve noon. I love you with all my soul and with my whole body, sometimes, on rainy afternoons.
But at two in the afternoon, or at three, when I
I start thinking about the two of us, and you think about the food or in daily work, or in entertainment that you don't have, I begin to hate you deafly, with
Half the hate I keep for myself
Then I love you again, when we go to bed and
I feel that you are made for me, that somehow your knee and your belly tell me, that my hands convince me of it, and that there is no other place in where I come, where I go, better than you
Body.
You come all whole to meet me, and
we both disappear for a moment, we get into in the mouth of God, until I tell you that I have hungry or sleepy

Every day I love you and I hate you irremediably.
And there are days too, there are hours, when
I know you, in that you are alien to me like a woman from another, I worry about men, I worry
I am distracted by my sorrows. You probably don't think in you for a long time. You see who could love you less than me my love?

Author: Jaime Sabines

I hope you liked the poem as well as the photographs.

Buenas tardes a todos amigos y amigas de hive, dicen que la primavera es el mes del amor y es por eso que les compartiré según los entendidos uno de los mejores 10 poemas de amor y también les compartiré unas hermosas fotografías sacadas por mi.

Te quiero a las diez de la mañana

Te quiero a las diez de la mañana, y a las once, y a las doce del día. Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo, a veces, en las tardes de lluvia.
Pero a las dos de la tarde, o a las tres, cuando me pongo a pensar en nosotros dos, y tú piensas en la comida o en el trabajo diario, o en las diversiones
que no tienes, me pongo a odiarte sordamente, con la mitad del odio que guardo para mí.
Luego vuelvo a quererte, cuando nos acostamos y siento que estás hecha para mí, que de algún modo
me lo dicen tu rodilla y tu vientre, que mis manos me convencen de ello, y que no hay otro lugar en donde yo me venga, a donde yo vaya, mejor que tu cuerpo.
Tu vienes toda entera a mi encuentro, y
los dos desaparecemos un instante, nos metemos en la boca de Dios, hasta que yo te digo que tengo hambre o sueño.

Todos los días te quiero y te odio irremediablemente.
Y hay días también, hay horas, en que no
te conozco, en que me eres ajena como la mujer de otro, Me preocupan los hombres, me preocupo yo, me distraen mis penas. Es probable que no piense
en ti durante mucho tiempo.
Ya ves ¿Quién podría quererte menos que yo amor mío?

Autor :Jaime Sabines

Espero que les haya gustado el poema como las fotografías.