Clay in the Potter's Hands || Barro en Manos del Alfarero [ENG/ESP]
Fuente
Good morning friends, God bless you. Today once again I have the pleasure and privilege of being able to share a few words with you and I want to take you to a book of the Old Testament, the book of Jeremiah where God took the prophet Jeremiah to a certain place to speak with him and he says so.
The Lord gave another message to Jeremiah:
"Go down to the potter's workshop and I'll talk to you there."
So I did as he told me and found the potter working on the wheel;
but the pot he was making did not turn out as he expected, so he crushed it and started again.
Then the Lord gave me this message:
O Yisrael! Can't I do with you what the potter did with the clay? In the same way that the clay is in the hands of the potter, so you are in my hands.
Jeremiah 18:1-6
Amen, if we have given our lives to God we are Clay as the word says, clay in the hands of the Potter. God is always in control of everything and will shape us until we get what he wants from us, we just have to stop fighting against him, we must seek intimacy with him, read his word and do what is written in it so that everything goes well .
There was an old song that I used to sing when I was a kid and it went something like this. Lord, I want to be in your hands like clay in the hands of the Potter, Lord, mold me as you want because I want to be a new glass.
Amen let's be clay in the hands of God, let's let ourselves be molded by our God and the result will be excellent.
God bless you.
Buen día amigos, que Dios les bendiga. hoy una vez más tengo el agrado y el privilegio de poder compartir unas palabras con ustedes y quiero llevarlos a un libro del Antiguo Testamento, el libro de Jeremías donde Dios lo llevó a un cierto lugar al profeta Jeremías para hablar con él y dice así.
El Señor le dio otro mensaje a Jeremías:
«Baja al taller del alfarero y allí te hablaré».
Así que hice lo que me dijo y encontré al alfarero trabajando en el torno;
pero la vasija que estaba formando no resultó como él esperaba, así que la aplastó y comenzó de nuevo.
Después el Señor me dio este mensaje:
«¡Oh, Israel! ¿No puedo hacer contigo lo mismo que hizo el alfarero con el barro? De la misma manera que el barro está en manos del alfarero, así estás en mis manos.
Jeremías 18:1-6
Amén, si hemos entregado nuestra vida a Dios somos Barros como dice la palabra, barro en las manos del Alfarero. Dios siempre tiene el control absolutamente de todo y nos moldeará hasta obtener lo que él desea de nosotros, solo debemos dejar de luchar contra, él debemos buscar la intimidad con él leer su palabra y hacer lo que en ella está escrito para que todo salga bien.
Había una antigua canción que cantaba cuando era niño y decía más o menos así. Señor yo quiero ser en tus manos como barro en las manos del Alfarero señor moldéame como tú quieras porque yo quiero ser un vaso nuevo.
Amén seamos barro en manos de Dios, dejémonos moldear por nuestro Dios y el resultado va a ser excelente.
Dios le bendiga.