De verdad que estos meses transcurridos han sido muy fuertes, debido a las dificultades de salud que ha presentado mi papá. Tanto así que tenemos dos meses mudados a su casa, ya que le han suministrado varios tratamientos y cuando creemos que todo va bien, se evidencia un retroceso y casi que volvemos al inicio. Esta tónica ha sido por una cantidad importante de meses. Gracias a Dios está tomando un nuevo tratamiento y al parecer poco a poco vemos luz al final del túnel, Dios permita que no sea falsa alarma como ha ocurrido antes.

Por lo pronto, este mes también ha sido muy movido ya que han cumplido años mi hija, mi mamá y ahora mi papá. Por lo menos en todos estos eventos se ha notado que papá ha estado un poco más animado. Ahora, el 25 de septiembre sería el cumpleaños número 71 de mi papá y queríamos estar convencidos que en este día él la pasaría bien, era lo que más queríamos. Bueno, mamá le había comprado una franela de regalo y mi esposa junto a mis hijos le compraron un reloj; ninguno de ellos quería esperar el amanecer para entregar los regalos; por ello, cuando llegaron un poco más de las 12 de la noche todos nos fuimos a su cuarto para sorprenderlo y hacerle llegar los obsequios.

Jajajaja, literalmente lo levantamos de la cama pero papá estaba muy emocionado con sus regalos, de verdad que sí. Ahora, cada uno si fue a dormir para preparar las sorpresas que le darían al amanecer. Mis hijos ya iniciaban la universidad por lo que se fueron muy temprano y al regresar lo felicitaron. Papá estaba contento pues lucía su franela nueva y de inmediato tenía puesto su reloj. Hicimos las comprar para la comida, específicamente para un pasticho que fue lo que pidió, él pensaba que no había torta porque no veía movimiento. Estuvimos toda la familia en el porche de la casa tomando vino y papá estaba tan contento que bailó varias pieza con mamá.

Pero durante el baile llegó mi regalo, la torta de melocotón y una hora después mi hermano que vive en puerto Ordaz, que esta vez no pudo venir, le mando a hacer una torta de fresas con chocolate, lo sorprendimos por partida doble, pero hace días papá decía, yo también quiero mis dos tortas jajajaja, bueno su deseo se cumplió, pero igual quedó sorprendido. Como es costumbre familiar, antes del catar cumpleaños todos nos sentamos a la mesa para comer y luego de reposar, viene la alegría del cumpleaños feliz, déjenme decirles que papá estaba demasiado contento, teníamos tiempo que no lo veíamos así y así queremos verlo siempre.

...Gracias Por Visitar...

Fotografías tomadas por mí y Militza Ñúñez desde mi teléfono tecno camon 18p

Use of the Deepl translator to translate texts into English

For the best experience view this post on Liketu