Haciendo carbón para escapar de la Covid-19/Making charcoal to escape from Covid-19.
La etapa de la Covid 19 fue muy dura para casi todas las familias del mundo. Momentos muy difíciles en los que había que esconderse hasta de uno mismo para no contagiarnos del virus. Por suerte no le tocó a ninguno de mi familia en la casa, pero el encierro y la falta de comunicación significó casi una tortura.
Yo me pasaba las horas internado en el monte, con la compañía de mis caballos, cortando hierva o atendiendo una pequeña huerta de tomates y lechugas que hice cerca de un pozo. Así transcurrían los días sin visitar la ciudad, ni utilizar el coche de caballos porque era muy peligroso y además estaba prohibido andar en la calle.
En esos días fallaba a veces la corriente y el gas licuado alargó su ciclo a más 26 días. Así que había que buscar alternativas para cocinar en casa. En dos o tres oportunidades compramos carbón. Este hacía que la comida quedara deliciosa, las raspas del arroz crujientes y la carne con un olor diferente pero sabroso. Pero cada vez era más caro comprarlo debido a la alta demanda y la poca existencia del producto. Así que a sugerencia de unos amigos agarré la idea de hacer un horno.
De adolescente había visto a mis abuelos y a mis tíos levantar hornos gigantes. Así que más o menos tenía la idea de cómo hacerlo. También los tíos y primos de mi esposa Enrique, Tite, Enriquito, con larga experiencia en el oficio nos dieron instrucciones. Ellos son hombres curtidos en el trabajo del campo y con muchos años de experiencia en estas labores. Ahora el trabajo es más humano pues la madera se corta con motosierra y hay lámparas recargables para alumbrar la oscura noche. Voy a contarles cada paso, a lo mejor se animan a hacer un horno. Así que será una especie de tutorial, eso está de moda.
1: La primera tarea: acopiar bastante madera, preferiblemente aroma que es más abundante, aunque había de diferentes especies guásima, yagruma, mamoncillo, yamao. Era necesario cortar para limpiar la vega que luego sembrarían de viandas y hortalizas unos amigos. Realmente el carbón de aroma es el mejor es una madera dura que rinde mucho en la hornilla y además no suelta humo y no tizna las cazuelas.
2 Segundo: una vez apilada la leña hace falta preparar lo que los caboneros llaman el plan de horno. Así limpié un terreno que ya había sido usado en esos menesteres.
3 Tercero: picar la leña en pedazos más pequeños. Entonces de a poco con la ayuda de mi caballo traje la leña para picarla en trozos más pequeños. Fueron varias las faenas empleadas, llevaba un poco de agua fresca y algo de merienda y antes de que el sol fuera fuerte ya tenía una pila grande de leña que fue creciendo con los días.
La leña ya estaba picada, ahora volví a consultar a los tíos y a vecinos que dominan ese trabajo, unos por teléfono y otros directamente me indicaron que hacer.
4 Cuarto: Acarrear paja de arroz, hierva cerca y guano, además tierra que después me serviría para tapar el horno, o sea cubrir la leña seca dispuesta una sobre otra, parada como si fuera una pirámide. En esa hierva seca venían miles de garrapatillas que me cayeron a mordidas porque aquello era más que picadas, nada que un poco de permetrina no solucionara.
5 Quinto: Tapar el horno con la paja o la hierba seca y la tierra después. En esos días en el monte encontré matas de pomarosa a la orilla del río, de lejos parecen guayabas pero en realidad tienen un sabor suave medio soso. También había tamarindos y mamoncillos, pero a mí no me gusta llevar esa semilla a casa, tengo miedo que la coman los niños y se atraganten.
6 Sexto: encender el horno por la parte de arriba, en un orificio se le coloca una especie de antorcha, por el medio y a la redonda se le hacen unos huequitos como respiraderos por dónde brota el humo ¡Qué olor desprende la leña quemando! Ésta parte es muy complicada pueden abrirse las llamadas bocas y quemarse todo enseguida. Así que hay que estar a la viva.
7 Siete: velar día y noche el desempeño del horno pues si se le abre un hueco puede quemarse enseguida y volverse cenizas. En la velada del horno los carboneros usan hacer canturias, caldosas, tomar algún poquito de ron. Esta vez yo no podía, la Covid estaba picando cerca y había que cuidarse. Así que estuve en vela casi tres días. Hasta que pasó un amigo y me dijo ya eso está, mira cómo ha bajado.
8 Octavo: sacar y refrescar el carbón. Con la ayuda de un gancho y de otras personas de experiencias fui sacándolo y regándolo a la redonda por el plan para que se enfriara.
9 Noveno: ensacar el carbón en sacos de tres o cuatro latas y ponerlos al aire libre. Recuerdo que mi suegra contaba que su papá ensacó el carbón caliente y cogió candela el pequeño ranchito donde vivían y ella y sus 6 hermanos tuvieron que vivir en casas de amigos y familiares hasta que reconstruyeron la casa, no podieron salvar nada del fuego.
10 décimo: Cargar los sacos en un carretón para guardar el carbón. Al fin la tarea echa. Algunas personas me ayudaron. Trabajadores de la Vega que igual que yo trataban de alejarse del virus y producir algún alimentos o carbón para su casa. Ya estaba listo el carbón, vinieron a la mente imágenes que el primo Enrique ha consultado en internet y nos ha enseñado: saquitos de 4 o 5 kilogramos que dicen: Carbón cubano de aroma, en diferentes mercados: Panamá, Canadá, Italia, España.
Después de quince días en esos trajines, por fin ese oro negro, 32 sacos bien llenos y una cola de gente para comprar. Ese tiempo me sirvió para ver los animales propios del lugar: varias jutias en celo, sinsontes, majaes eran los dueños de aquel pedazo de campiña. Aprendí a hacer cocimientos de plantas medicinales como con la hoja de yagruma para el catarro y bejuco ubí para la fiebre.
Que oficicio tan duro, se pincha uno, coges sol, haces fuerza. Hacer carbón es un arte una tradición cubana. Si aprendieron algo espero sus fotos aplicando los pasos en sus hornos, así dicen los que salen en los tutoriales de YouTube. La verdad los respeto mucho, yo prefiero ser cochero.
Todas las imágenes utilizadas son tomadas con el celular del primo Enrique xiaomi redmi note 7
The Covid 19 stage was very hard for almost all the families in the world. Very difficult moments in which we had to hide even from ourselves in order not to catch the virus. Luckily none of my family was affected at home, but the confinement and lack of communication was almost torture.
I spent the hours in the bush, with the company of my horses, cutting grass or tending a small garden of tomatoes and lettuce that I made near a well. This is how the days went by without visiting the city or using the horse-drawn carriage because it was very dangerous and it was forbidden to ride in the street.
In those days the electricity sometimes failed and the liquefied gas extended its cycle to more than 26 days. So we had to look for alternatives to cook at home. On two or three occasions we bought charcoal. It made the food delicious, the rice scrapes crispy and the meat with a different but tasty smell. But it was getting more and more expensive to buy it due to the high demand and the scarcity of the product. So at the suggestion of some friends I got the idea of making an oven.
As a teenager I had seen my grandparents and uncles build giant ovens. So I more or less had the idea of how to do it. Also my wife's uncles and cousins Enrique, Tite, Enriquito, with long experience in the trade, gave us instructions. They are men who have been working in the fields for many years and have many years of experience in these tasks. Now the work is more humane because the wood is cut with a chainsaw and there are rechargeable lamps to light the dark night. I am going to tell you each step, maybe you will be encouraged to make a kiln. So it will be a kind of tutorial, that's fashionable.
1 The first task: to gather enough wood, preferably aroma, which is more abundant, although there were different species of guásima, yagruma, mamoncillo, yamao. It was necessary to cut in order to clear the fields that would later be planted with vegetables by friends. The aroma charcoal is really the best, it is a hard wood that yields a lot in the stove and also does not release smoke and does not stain the pots.
2 Second: once the firewood has been stacked, it is necessary to prepare what the caboneros call the oven plan. This way I cleaned a piece of land that had already been used for that purpose.
3 Third: chop the firewood into smaller pieces. Then, with the help of my horse, I brought the firewood to chop it into smaller pieces. I carried some fresh water and some snacks and before the sun was strong I already had a big pile of firewood that was growing with the days.
The firewood was already chopped, now I went back to consult the uncles and neighbors who mastered the job, some by phone and others directly told me what to do.
4 Fourth: To carry rice straw, nearby grass and guano, as well as soil that would later be used to cover the oven, that is, to cover the dry firewood arranged one on top of the other, standing up as if it were a pyramid. In that dry grass came thousands of ticks that bit me because that was more than bites, nothing that a little permethrin could not solve.
5 Fifth: Cover the oven with straw or dry grass and earth afterwards. In those days in the bush I found pomarosa bushes on the river bank, from far away they look like guavas but in reality they have a mild flavor half bland. There were also tamarinds and mamoncillos, but I don't like to take that seed home, I'm afraid the children will eat it and choke on it.
6 Sixth: to light the oven by the part of above, in an orifice a species of torch is placed to him, by the means and to the round one they make him some holes like vents by where the smoke comes out What smell gives off the burning firewood! This part is very complicated, the so-called mouths can open and burn everything right away. So you have to be on the alert.
7 Seven: to watch day and night the performance of the oven because if a hole is opened it can burn immediately and become ashes. In the evening of the oven the charcoal burners use to make canturias, caldosas, drink a little rum. This time I could not, the Covid was biting nearby and I had to be careful. So I stayed awake for almost three days. Until a friend of mine passed by and told me that's it, look how it has gone down.
8 Eighth: remove and cool the charcoal. With the help of a hook and other experienced people I was taking it out and sprinkling it all around the plan to cool it down.
9 Ninth: bagging the charcoal in sacks of three or four cans and putting them out in the open air. I remember my mother-in-law telling about how her dad bagged the hot coal and set the little ranchito where they lived on fire and she and her 6 siblings had to live in the homes of friends and relatives until they rebuilt the house, they couldn't save anything from the fire.
10 ten: Loading the sacks onto a cart to store the coal. Finally the task was done. Some people helped me. Workers from the Vega who, like me, were trying to get away from the virus and produce some food or charcoal for their homes. The charcoal was ready, images came to mind that cousin Enrique had consulted on the internet and showed us: little bags of 4 or 5 kilograms that say: Cuban charcoal of aroma, in different markets: Panama, Canada, Italy, Spain.
After fifteen days in those trajines, finally that black gold, 32 well-filled sacks and a queue of people to buy. That time I was able to see the animals of the place: several jutias in heat, mockingbirds, majaes were the owners of that piece of countryside. I learned to make decoctions of medicinal plants such as yagruma leaf for colds and bejuco ubí for fever.
What a hard job, you prick yourself, you catch the sun, you make strength. Making charcoal is an art, a Cuban tradition. If you have learned something, I am waiting for your photos applying the steps in your ovens, so say those who appear in the YouTube tutorials. The truth is that I respect them a lot, I prefer to be a coachman.
All images used are taken with cousin Enrique's cell phone xiaomi redmi note 7
Congratulations @juliom! You have completed the following achievement on the Hive blockchain And have been rewarded with New badge(s)
Your next payout target is 100 HP.
The unit is Hive Power equivalent because post and comment rewards can be split into HP and HBD
You can view your badges on your board and compare yourself to others in the Ranking
If you no longer want to receive notifications, reply to this comment with the word
STOP
To support your work, I also upvoted your post!
Check out our last posts:
Support the HiveBuzz project. Vote for our proposal!
Tremendo trabajo, muy sacrificado y honrado. La historia de mi padre y mis tíos es muy parecida. Yo disfrutaba de niña de las canturias y las caldosas alrededor del horno creo que por eso soy medio poeta.
Está fuerte ese trabajo, pero qué bonitas imágenes. El trabajo en el campo no es cosa fácil... creo que las fotos de mi horno se las voy a deber 😅... yo tambien prefiero ser cochero.
Excelente su post 👏. Me alegra tenerlo por acá.
Gracias amigo si es muy fuerte. Hay que pensarlo mucho para hacerlo pero ahora es más humano ya no se usa hacha y machete y hay luz en la noche. Lo de los pasos me salió la idea cuando vi la publicación de @dayanart haciendo una abejita y dijo algo así que esperaba las fotos de nosotros haciéndolas y luego vi a mi esposa haciendo el patrón y cortando y yo escribiendo esto. Pero tranquilo con lo que sabes y escribes en el grupo de aprendiendo hive es suficiente.
Arduo trabajo en verdad!!! Pero cualquier trabajo por duro que sea siempre honra. Excelente post amigo mío!!!!
Frente a tu casa se hacían buenos hornos.
Mientras leia y tu post mi admiración por los trabajadores de la tierra crecía. 🙌Durante el covid e incluso en el año pasado que en Oriente cubano estaba más tiempo sin electricidad que con ella, mis suegros también tuvieron que preparar carbón para el consumo de a familia, que es muy numerosa. Nada fácil, nada fácil.
Me encantó tu post y tus fotos!
Muy agradecido de su comentario. Si en todos los lugares hay que buscar las alternativas para resolver los problemas. Porque lo que si no se puede uno es morir con lo brazos cruzados. Buena historia sería si usted cuenta cómo lo hicieron sus suegros.
Tremendo tutorial, ya se a quien llamar para cuando tenga la finca.jajajjajajjajja
Por ahora le mandaré los asdos que hago con el carbón. Un día de estos hago un post de ellos
... que modestia y aparte me quedan riquísimos. Jajajjajaja
Es duro el trabajo en el campo, pero me gustó cuando dijo que los días allí le permitieron observar la naturaleza. Creo que esa es la parte que hace soportable ese gran esfuerzo.
Un saludo.🙏💚🌱
Aquí también asamos pollo en un pequeño hornito con carbón. La de los tutoriales eres tú estás escapa como dicen los muchachos. La abejita no nos sale aún así tan linda en casa no hay fieltro. Mi esposa quería hacerla junto con el niño de nosotros para educación laboral pero habrá que comprar eso.
Post votado por la Curación de la Comunidad de Mundo Virtual. Recibes algunos Huesos
Te invitamos a que conozcas nuestra Comunidad de Hive
Dura faena, pero, en un tiempo que fue muerto para media humanidad tú aprendiste a hacer carbón. Ahora nos enseñas como hacerlo y me doy cuenta que mientras nosotros en la Habana pasábamos 10 horas de colas para comprar algo (con el morro tapado con un nasobuco), disfrutaban el lujo de estar en medio del campo, aire limpio y cafecito colado al carbón, aprendiendo a hacer algo útil. Lindo en verdad, las garrapatillas son un mal menor, el sabor de la comida con ese carbón debe haber elevado el nivel de las papilas gustativas...
Saludo
Si muy rica la comida con carbón. Lo mejor que me pudo pasar fue coger para el monte a respirar aire puro y buscar el sustento para mí familia. Un gusto compartir eso del carbón.