[ENG-SPN] Finisterre and the way back / Finisterre y el Camino de Regreso

I suppose I could say, without any qualms, that a lifetime has passed since those distant and happy days, barely opened, to the glory of the Unconquered Sun, the magic gates of the summer solstice, in which my weary feet trod the infallible solitudes of one of the northernmost capes of the Iberian Peninsula, which, comparatively speaking, constitutes the Alpha and also the Omega, of the ancient pilgrimage paths: the mythological Finis Terrae or End of the World for all cultures and civilizations of the Antiquity, Cape of Capes, Cape Finisterre. Today, exercising my memory in the noble art of speculative feelings, I am pleased to remember that glorious experience and to share again here, facing the gallery, what I wrote down in my old logbook and at the time I recorded in one of my most beloved blogs, which is none other than the one entitled 'Memories of a pilgrim'.
“Fisterra. The ancient Finis Terrae. The end of the earth. The kingdom of sunset, inside whose waters lives a terrible monster that swallows the sun every evening, to regurgitate it at dawn. The kingdom of the ancestors, the kingdom of the dead. The Amenti of the ancient Egyptians...And now what, one wonders when it arrives. There is only one answer: now another Camino begins. The Way Back. Gone are the old boots, like offerings to the voracious manes and the new steps sound with a different echo. If the Path of Ida was towards Death, the Path of Return returns towards Life. They are the two ways of the World. The cycle that the Sun goes through each day. And between one and the other, the pilgrim knows, the Miracle occurs. That is, the transformation. Hoist, then, like Bilbo, the sails, pilgrim, and depart with the east wind, tightening the mooring lines to plunge into a sea full of dreams”(1).

References: As has already been said, the second part of this post accurately reflects what I posted at the time in my blog 'Recuerdos de un peregrino', whose reference I find in the following link: http://jc347.blogspot.com/ 2016/07/fisterra-the-end-of-the-road.html

Supongo que podría afirmar, sin ninguna clase de tapujos, que ha pasado toda una vida desde aquellos lejanos y felices días, apenas recién abiertas, para gloria del Sol Invicto, las mágicas puertas del solsticio de verano, en los que mis cansados pies hollaron las soledades infalibles de uno de los cabos más septentrionales de la Península Ibérica, que, comparativamente hablando, constituye el Alfa y también la Omega, de los milenarios caminos de peregrinación: el mitológico Finis Terrae o Fin del Mundo para todas las culturas y civilizaciones de la Antigüedad, el cabo de cabos, el cabo Finisterre. Hoy, ejercitando mi memoria en el noble arte de los sentimientos especulativos, me es grato recordar aquella gloriosa experiencia y volver a compartir aquí, de cara a la galería, lo que anoté en mi viejo cuaderno de bitácora y en su momento consigné en uno de mis blogs más queridos, que no es otro, que el que lleva por título ‘Recuerdos de un peregrino’.

“Fisterra. El antiguo Finis Terrae. El final de la tierra. El reino del ocaso, en el interior de cuyas aguas habita un terrible monstruo que se traga al sol cada atardecer, para regurgitarlo con el alba. El reino de los antepasados, el reino de los muertos. El Amenti de los antiguos egipcios...Y ahora qué, se pregunta uno cuando llega. Sólo hay una respuesta: ahora comienza otro Camino. El Camino de Regreso. Atrás quedan las viejas botas, como ofrendas a los voraces manes y los nuevos pasos suenan con eco distinto. Si el Camino de Ida fue hacia la Muerte, el Camino de Regreso vuelve hacia la Vida. Son los dos caminos del Mundo. El ciclo que recorre el Sol cada día. Y entre uno y otro, el peregrino lo sabe, se produce el Milagro. Es decir, la Transformación. Iza, pues, como Bilbo las velas, peregrino, y parte con el viento del este, tensas las amarras para zambullirte en un mar repleto de sueños”(1).

Referencias: Como ya se ha dicho, la segunda parte de este post recoge fielmente lo que en su momento consigné en mi blog ‘Recuerdos de un peregrino’, cuya referencia constato en el siguiente enlace: http://jc347.blogspot.com/2016/07/fisterra-el-final-del-camino.html

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