Colon Cemetery, an open-air museum(en/en)

   ENGLISH VERSION.

It may seem too much of a coincidence that once again in my purpose of visiting the Cuban capital for private matters, when taking time to capture images with my cell phone, I meet a friend from the premises of Hive. This event has already happened several times.

And I'm grateful that @jordy0827 showed up, because I was passing near the Columbus cemetery, and not out of fear, but it's not a place I like to visit. But we were both headed for almost the same spot at the opposite end of Campo Santo. And she urged me to cross it to fulfill Pythagoras' statement that "the shortest distance between two points is a straight line" and that's what we did.

She had already alerted me to the sculptural and architectural beauties that share time, space and silence.

We entered the sacred space, located in the Nuevo Vedado area of Havana, passing through the imposing portal formed by three semicircular arches, a large one in the center for access to the funeral services, and two smaller ones (one on each side) as service doors, in the style of the great triumphal arches of antiquity through which the great warriors dressed in glory entered the city victorious

Before my eyes were displayed artistic works of incalculable beauty worthy of being in public places and museums to be admired for their artistic and aesthetic values, beyond their link with pain and death.

I was delighted in the general contemplation and not so much in the details, of which to speak in a more particular way will have to be very extensive or to make several publications. There, the statuary ranges from the most classic and complex, such as the monument to firefighters and others, to a simple mantle modeled on a rustic cement cross that mimics the texture of a timber.
In antiquity, art was first funerary and allegorical and then pure contemplation and visual delight. When observing these works in the Colon Cemetery, the idea of pain and death quickly disappears under the intoxicating effects of the beautiful forms and the refined finishes of the pieces. It really gave me the sensation of being more in an open-air museum than in the eternal resting place of the mortal remains that are deposited there.

When there is art, the most rebellious material is ennobled and the hardest marble softens and becomes etheric and volatile matter in the hands of artists. The architecture also has much prominence in the broad funerary urbanity of Colon and also ranges from the most classic and arabic to the most rational and pure in the structure. Or the eclectic combination of many styles and different epochs.

In the opposite direction, I was very impressed by the super-decorated obelisk-like monument dedicated to the firefighters. A waste of perfection and imagination from the base to the top of the four-sided obelisk where there seems to be no end to the desire to pay homage to the colleagues who have historically succumbed in the disasters they have faced.

The visitor is assaulted by an outpouring of art on all sides, and it is like a balm of marble and other materials, so that where pain ends, eternity begins, and the eternal beauty of art is also reflected in the crystal of a tear.

As an artist I can not repress the feeling of these emotions and to enter into descriptions and supposed technical language that may not seem fresh and drawn from sources that I do not know. But they are just part of my daily link with art.

Thank you .

       VERSION EN ESPAÑOL

Pudiera parecer excesiva coincidencia el hecho de que una vez mas en mi propósitos de visitar la capital cubana para cuestiones particulares, a la hora de tomar tiempo para capturar imágenes con mi telefono celular, me encuentre con una amiga de los predios de Hive. Este evento ha sucedido ya varias veces.

Y agradezco que @jordy0827 haya aparecido, pues pasaba cerca del cementerio de Colón, y no es por temor, pero no es lugar que me guste visitar. Pero los dos nos dirigíamos casi al mismo lugar en el extremo opuesto del Campo Santo. Y me instó a una travesía a través del mismo para cumplir el enunciado de Pitágoras de que "la distancia mas corta entre dos puntos, es una recta" y eso fue lo que hicimos.

Ya ella antes me había alertado de las bellezas escultoricas y arquitectónicas que allí comparten tiempo, espacio y silencio.

Entramos al espacio sacro, ubicado en la zona del Nuevo Vedado habanero, pasando por la imponente portada conformada por tres arcos de medio puntos, uno grande al centro para el acceso de los servicios funerarios, y dos menores (uno a cada lado) como puertas de servicio, al estilo de los grades Arcos de triunfo de la antigüedad por donde entraban victoriosos a la ciudad los grandes guerreros vestidos de gloria.

Ante mis ojos se mostraron obras artisticas de incalculables bellezas dignas de estar en lugares públicos y museos para que sean admiradas por sus valores artísticos y esteticos, mas allá de su vinculo con el dolor y la muerte.

Me deleité en la contemplacion general y no tanto en los detalles, de los que para hablar de forma mas particular tendrá que ser muy extenso o realizar varias publicaciones. Allí, la estatuaria va desde lo mas clásico y complejo, como el monumento a los bomberos y otros, hasta un simple manto modelado sobre una rústica cruz de cemento que imita la textura de un madero.

En la antiguedad el arte fue primero funerario y alegorico y despues pura contemplacion y deleite visual. Al observar estas obras en el cementerio de Colon, la idea de dolor y muerte desaparece rapidamente bajo los efectos embriagadores de las bellas formas y los refinados acabados de las piezas. Lo que realmente me dio la sensacion de estar mas en un museo al aire libre que en el lugar del reposo eterno de los restos de de los mortales que alli estan depositados.

Cuando hay arte, el material mas rebelde se ennoblece y el mármol mas duro se ablanda y se convierte en materia eterea y volátil en las manos de los artistas. La arquitectura tambien tiene mucho protagonismo en la amplia urbanidad funeraria de Colon y tambien va desde lo mas clásico y arabizante hasta lo mas racional y puro en la estructura. O la combinación ecleptica de muchos estilos y diferentes épocas.

En los sentidos opuestos me quedé muy impresionado por el monumento con porte de obelisco supradecorado dedicado a los bomberos. Un derroche de perfeccion e imaginación desde el basamento hasta la cúspide del obelisco de cuatro caras donde parece no se agotan los deseos de homenajear a los compañeros que históricamente han sucumbido en los siniestros a los que se han enfrentado.

Derroche de arte por todos lados asaltan al visitante, y es como un bálsamo de marmol y otros materiales, para que allí donde termina el dolor comienza la eternidad, y en el cristal de alguna lagrima se refleje tambien la belleza eterna del arte.

Como artista no puedo reprimir el sentir estas emociones y a entrar en dedcripciones y supuesto lenguaje tecnicista que pueden no parecer frescas y estraidas de fuentes que no sito . Pero solo son parte de mi vinculo cotidiano con el arte

Gracias .
Fotos tomadas con mi telefono celular

Texto originsl de mi propiedad.